Baterías de estado sólido muy baratas gracias a un nuevo ánodo de sodio, hierro y azufre

2022-10-15 00:53:15 By : Ms. Cherry Chan

Estamos acostumbrados a que lo caro sea mejor y, por contra, lo barato sea peor. Sin embargo, no siempre es así, y lo han demostrado esta vez científicos de la Universidad Metropolitana de Osaka. Y en algo que influye de forma directa a las baterías de coches eléctricos. Más específicamente, a las baterías de estado sólido que dentro de pocos años se montarán en nuestros vehículos eléctricos. Lo que han hecho es desarrollar un ánodo, que es el electrodo positivo, de sodio, hierro y azufre, que no solo ofrece mejores prestaciones sino que además es más barato.

Las baterías de estado sólido son la ‘próxima generación de baterías’ que llegará a los coches eléctricos. Y aunque lo habitual es que una nueva tecnología sea más cara que la anterior, gracias a este nuevo ánodo las cosas no van a ser exactamente así. Este grupo de científicos ha podido probar que este ánodo se puede usar en cualquier batería de estado sólido sin importar la composición química de su cátodo y las particularidades de su separador. Y además de conseguir unas muy buenas prestaciones, también hace que sea mucho más barata la batería que si se utiliza otra composición química. A fin de cuentas hablamos de materiales –el sodio, el hierro y el azufre- que tienen una muy alta disponibilidad y también un precio muy bajo. La han sometido a más de 300 ciclos de carga y descarga y no ha mostrado problemas de degradación prematura significativos, lo cual es una excelente noticia.

Estos científicos han desarrollado un nuevo ánodo, que es el electrodo positivo de una batería. Y lo habitual es, en realidad, que se trabaje el desarrollo de las baterías centrándose en el cátodo, que hace variar en gran medida las prestaciones de una batería en función de su composición química. Este nuevo ánodo es para baterías de electrolito sólido, más conocidas como baterías de estado sólido. Y tiene la gran ventaja de que es compatible con casi cualquier composición química de cátodo. Esto quiere decir, por otra parte, que es una nueva química que va a permitir que cualquier batería de estado sólido sea más barata de lo que estaba previsto.

Y no solo es importante que sea barata, sino que además es una composición química que difícilmente puede subir de precio por la falta de disponibilidad de materiales, y que difícilmente puede provocar cuellos de botella como los que están provocando ahora mismo todas las baterías de litio. Aunque a las actuales les afecta la escasez de litio, este cátodo tiene materiales muy disponibles, así que este tipo de problemas no tendrían relevancia de ningún tipo. Y tal y como avanzábamos, han hecho pruebas de durabilidad que han tenido muy buen resultado en cuanto a ciclos de carga y descarga.

Según han indicado desde el grupo de investigación, esta tecnología está lista para poder ser aprovechada en los próximos años en baterías de estado sólido. Y mientras tanto van a seguir trabajando para intentar desarrollar baterías basadas en sodio que tengan unas mejores prestaciones, sobre todo, en cuanto a la velocidad de recarga. Este ánodo no han señalado que tenga ningún tipo de ventaja en particular que afecte a la velocidad de carga de las baterías, pero estas ventajas pueden venir dadas también por las características específicas del cátodo que se utilice.

En los últimos meses estamos viendo centenares de avances tecnológicos que afectan a las baterías actuales, pero también a las futuras baterías de estado sólido. Parece que el ritmo de investigación, y de desarrollo, se está acelerando. A fin de cuentas, a nivel global la demanda de baterías está creciendo de forma exponencial por el interés en los coches eléctricos. Así que es un momento en el que estamos a punto de ver gigantescos cambios técnicos que afecten positivamente a los coches eléctricos y cada muy poco tiempo.